Cuando el pterigion produce molestias al paciente o aumenta de tamaño hasta acercarse o ocupar la zona pupilar, provocando un astigmatismo o impidiendo la visión, es necesaria una cirugía.
Para realizarse la cirugía es necesaria una exploración oftalmológica completa.
Después de la cirugía se coloca un parche, que se retira en las siguientes 24 horas. El ojo estará rojo, tardará unas pocas semanas en recuperarse.